Sujeto Amante III

AMAN NO SER AMADOS… claramente esta es la diferencia. Mas allá de estar escrito con algo de parodia, la principal diferencia entre un objeto y un sujeto, es que el sujeto no necesita recibir amor para que se le produzca enamoramiento. No es condición necesaria.

Un objeto ama en relación a lo que recibe, un sujeto ama en relación a lo que percibe. En otras palabras, el sujeto te ama por quien eres, en cambio el objeto te ama por lo que le das. Ojo, todos necesitamos un poco de ambos, sin embargo el límite radica en esta diferencia: un objeto jamás te amará sino se siente amado, mientras que un sujeto puede amar sin ser amado.

Habiendo aclarado las diferencias…

El sujeto amante es proactivo siempre: Percibe, siente y acciona. Es el depredador de la relación con libertad de movimiento. Hace lo que quiere cuando quiere dentro de los límites que encuentra. No cuida mucho de nada, simplemente es.

Es por este motivo que suelen parecer mas extrovertidos en su personalidad, mas transparentes también. Pero la transparencia no radica en contar todo, sino en hacer visible lo que sienten. Si al sujeto le gusta el objeto, y el objeto reacciona en relación a lo que le transmite el sujeto, claramente alguien tiene que mostrarse primero.

Muchos objetos dicen… “Como amar a quien no te ama?”. Yo me pregunto… quién dice te amo primero entonces? Y no solo decir, quién lo demuestra primero? Alguien tiene que amar sin ser amado para que ustedes, objetos, puedan amar también, no? Y no me digan esa boludez que las cosas pasan en simultáneo, ya que les puedo asegurar a ustedes, objetos, que no saben el trabajo de exposición que implica que se animen a sentir algo.

Ahora bien, sentir amor sin ser amado genera frustración… horrible frustración. El sujeto amante prácticamente vive en dolor constante. Un dolor tolerable claro, y que no hay dudas que le encanta sentir. Para que un sujeto subsista debe perseguir. La satisfacción no esta en comer sino en la carrera, y en la carrera hay cansancio, frustración, ansiedad, momentos de desilusión, expectativas, y un montón mas de sensaciones que pareciera que nos joden pero que en realidad es lo único que queremos.

Nosotros los sujetos, no nacimos para ser felices en paz, nacimos para sufrir y nuestra felicidad esta asociada a esa sensación de estómago revuelto. Darse cuenta de este pequeño detalle, es aprender a disfrutar lo lindo de lo que nos toca vivir en lugar de pensar cosas como: “No tengo suerte en el amor”, “me equivoco mucho”, “siempre me va mal”, etc. Capaz son mas inteligentes los masoquistas, quienes realmente se interpretan correctamente disfrutando de cosas que para otros sería una locura.

Masoquismo: Forma de comportamiento sexual en la cual una persona obtiene placer del dolor propio, ya sea físico o psíquico. 

Hay muchas cosas que hacemos hoy en día que implican dolor sin embargo decidimos padecerlo para disfrutar un placer mayor. Se me ocurren varios, por ejemplo: Hacerse un tatoo, un piercing, sexo anal, etc. 

Se que a algunos les va a sonar dramático, pero piénselo de esta forma: Todo sujeto tiene otros sujetos que lo aman, sin embargo suele ignorarlos. Si decidiera convertirse en objeto, solo tendría que aprender a disfrutar de quien lo ama, en lugar de seguir persiguiendo lo inconquistable. Seguro que algunos sujetos me van a decir: “Es que justo la que me gusta no me da bola”. Realmente creen que eso es casualidad? Hay muchas personas en el mundo, como te vas a enganchar siempre con quienes no te observan?

Ojo, porque los sujetos solemos entrar en la “Cadena de Infelices”. Igualmente, como creo que deberíamos relacionarnos entre objetos y sujetos viene en otro capitulo.

El sujeto amante también necesita ser querido claramente, pero la diferencia radica en quien le da ese cariño. Los sujetos amantes tienen fuertes lazos afectivos con amigos o con su familia. Su refugio, el lugar donde cargan energías esta ahí. De algún lado había que sacarlas no? Nosotros los sujetos, vamos a la casa de nuestros padres, o nos juntamos con amigos, cargamos nafta y la vamos a derrochar con nuestro o nuestros objetos.

Y cuál es la estrategia del sujeto amante? Principalmente es mas estadístico que otra cosa, el sujeto busca todo aquello que le atrae. Considera que va a perder una “n” cantidad de veces, pero también sabe que tarde o temprano va a ganar. Se lanza seguro y con sus mejores armas contra su objeto, esperando captar su interés. Si realmente alguien le atrae con mayor intensidad que el resto, probablemente estudiará un poco mas su “presa” en la búsqueda de encontrar su debilidad. Como ya dije antes, para un objeto la seguridad es un atributo que les despierta interés, por eso es difícil encontrar sujetos inseguros. 

Pueden ser inseguros en otros planos, pero no en la conquista. Una leona no puede ser insegura a la hora de cazar, porque sino no come. El cazar implica riesgos, que para un sujeto ya están asumidos. No es que no tengamos miedo, simplemente es parte del juego. Las sensaciones las experimentamos todos, la diferencia es que un sujeto se acostumbra a convivir con algunas no tan agradables.

Además en parte también corremos menos riesgos… Si nuestra dependencia a ser queridos esta vinculada a relaciones más solidas y seguras como la amistad o la familia, cuando nos relacionamos en el plano afectivo-sexual solo ponemos en juego la atracción, una sensación muy intensa pero que tiene que ver mucho mas con el ocio y el placer, que con necesidades vitales o necesarias para estar mínimamente bien. Imaginen que si pusiéramos en juego nuestra necesidad de ser queridos en cada pareja o relación que tuvimos, el temor a la pérdida o a salir lastimados sería peor.

Otra característica del sujeto amante, y la que mas me gusta a mi, es aquello que describí como “libertad de movimiento”. La libertad de movimiento es algo que solo posee el sujeto amante. Por ser el sujeto quien se acerco acudiendo a los llamados conscientes o inconscientes, naturales o construidos de su objeto amado, este puede decidir cuando alejarse. 

El amante se acerca a su amado cuando quiere y mientras lo desea, el día que deja de sentirlo o simplemente no quiere, lo deja de hacer. El objeto es reactivo, al depender siempre del movimiento del sujeto, cuando este se deja de mover, el objeto inicialmente también. Esto produce una suerte de independencia del sujeto amante con respecto a su objeto amado.

Obviamente en el tiempo ambos buscarán otro objeto y otro sujeto respectivamente.  Por eso no hay una posición favorable ni de un lado ni del otro, esta todo perfectamente balanceado. Si todos fuéramos sujetos me muero, por eso creo que todos estamos conformes con el rol que nos toco vivir. 

Muchas veces me he hecho estas preguntas… Por qué elijo a voluntad vivir todos los días la sensación de angustia e intranquilidad de ser sujeto vs. la paz armónica de un objeto? Por qué elijo perder tantas veces por una victoria ocasional? Porque elijo el sabor amargo de estar expuesto 100%?

Porque no hay goce mas placentero que aquel que se percibe de un logro resultado de un sacrificio considerable. Esto no aplica al amor, aplica a todo, por ende el amor no podía quedar afuera. 

Porque al ser independientes, comunicándole al otro aquello que sentimos no genera una pérdida de control sobre nosotros mismos. Como no somos animales, primero sentimos la pulsión y luego decidimos movernos, pero también podemos elegir no hacerlo. De esta forma, comunicar lo que sentimos no nos condiciona en absoluto. Todo lo contrario, comunicar nos acerca a nuestro objeto amado.

Para concluir entonces… cómo manejar un sujeto amante? Dándole siempre algún motivo para que te siga conquistando. Esto no significa que no lo ames, solo implica limitarlos, que siempre este presente tu voluntad de desaparecer si las cosas se tornan de una forma que no te gusta. Si el sujeto siente que su objeto esta tan conquistado que ya no debe hacer nada para ser amado, automáticamente buscará un nuevo objeto.

Sino podes hacer esto, no se te ocurra enamorarte de un sujeto amante…